No es que los lectores de tarot de otros países no sean válidos sino que generalmente asisten desde un gabinete.

Lo hago desde mi propia casa y atiendo personalmente a cada llamada ya cada cliente, con todo mi cariño y como si los problemas que tuve fueran míos.

No voy a decir que soy el mejor psíquico de España porque no me toca a mí decirlo, pero muchos de mis clientes me lo dicen y es porque llaman a otros lugares y ven la diferencia.

Conmigo es posible realizar una consulta seria y confiable con alguien que ama su trabajo y que le gusta ayudar a los demás con mi clarividencia natural desde que nace.

Ha habido ocasiones en las que ambos hemos terminado llorando ante la llegada de noticias positivas tan esperadas.

No hay nada más bonito que sentirse parte de la buena suerte de una persona que ya forma parte de su entorno más íntimo, de una persona que ha tenido el valor de confiarte sus más profundas preocupaciones y miedos en busca de una ayuda que no ha tenido. he podido encontrar en otro lugar.

Tengo la suerte de tener un regalo especial, poder visualizar las respuestas a determinadas preguntas concretas a través de las figuras del tarot y dejarlas conocer al interesado.

Las cartas me revelan mensajes, susurran palabras que solo yo puedo escuchar.

Amo mi trabajo, quiero ayudar a todas las personas que lo necesiten y por eso te invito a que me dejes ser parte de tu entorno, a hacerme esa confidente que llevas en tu celular y que acudes a ella cuando te preocupes. abrumarte.

Un trato personalizado, profesionalidad en todos los detalles y un apoyo incondicional son los condimentos con los que te prepararé tu lectura de tarot, para que puedas saborear el mejor plato que te puede ofrecer la vida, tu propio vidente.

Me considero un buen vidente porque tengo razón en mis predicciones y lo que te digo se hará realidad, de eso puedes estar seguro.

Aunque te recuerdo que puedes cambiar tu futuro si actúas de una forma u otra.

Mi concepción de la clarividencia y mi forma de entender las consultas me hace pensar que es fundamental que la lectora de tarot, por muy buena que sea, tenga ese don natural de la clarividencia.

Puedes ser uno de los llamados buenos tarotistas, conocer en profundidad las cartas del tarot pero si te falta clarividencia, ese don con el que naces y no aprendes, no podrás dar respuestas concretas ni fechas exactas.

Por eso, además de atender personalmente sin gabinete, baso mi consulta en la clarividencia y por eso me consideran un buen vidente, porque tengo razón y no suelo fallar.

Tener mi propia consulta de tarot sin gabinete me ha permitido ofrecer a las personas que acuden a mí un trato mucho más personalizado.

Puedo llegar a conocer mejor a cada persona que busca mi ayuda, volviéndome enormemente empático con ellos. Los buenos videntes sin un gabinete saben que cuando una persona se acerca a nosotros, la relación con esa persona se fortalece.